Prensa Agrotime: El esturión es uno de los peces más arcaicos que existen. Tiene la cabeza y el cuerpo protegidos por placas óseas, como un caparazón, y guarda cierto parecido con los tiburones. Aunque este peculiar pez vive en otros ríos y lagos del hemisferio norte, su principal hábitat es el mar Caspio. En Europa se crían varias especies, entre las que cabe citar el esturión siberiano, el esturión común y el esturión adriático las cuales están amenazadas o en grave peligro de extinción. Su población ha disminuido de forma drástica debido a la pesca intensiva y a la contaminación. Por tanto, la cría del esturión es importante no sólo para la producción de carne y caviar, sino también para la reconstitución de esta especie; por consiguiente, esta práctica resulta beneficiosa para la conservación de las poblaciones salvajes. A continuación te presentamos la mejor información en relación al control de enfermedades bacterianas presentes en el esturión.
Las enfermedades infecciosas representan una amenaza permanente para los sistemas de producción acuícola se estima que no menos del 10% del total de los animales acuáticos cultivados en el mundo se pierden directamente como efecto de diversas enfermedades infecciosas ocasionadas por parásitos, bacterias, virus y hongos. El uso de antibióticos y productos antimicrobianos son de indudable ayuda para el control de algunas enfermedades, Sin embargo se han desarrollado diferentes técnicas de inmunización en animales acuáticos entre los que se incluyen métodos por inyección, la vía oral y las inmersiones.
La vacunación por inyección intraperitoneal (el área que contiene los órganos abdominales). Es el método más efectivo de inmunizar peces y permite el uso de adyuvantes que pueden mejorar la respuesta inmune. Las principales desventajas de este método es que los peces deben ser sedados y manipulados, lo cual produce estrés en ellos. Adicionalmente, se requiere bastante mano de obra y no se puede usar en peces muy pequeños.
La vía oral representa una serie de ventajas, ya que se puede administrar en peces de todos los tamaños, sin interferir con el manejo normal de éstos. Sin embargo, este método tiene como limitaciones que se requiere una mayor cantidad de antígenos, los peces ingieren dosis diferentes y desafortunadamente muchos ensayos han demostrado niveles bajos o inconsistentes de protección. Uno de los problemas asociados a la vacunación oral es la destrucción parcial o total de los antígenos a nivel estomacal. Es posible que este último problema pueda ser superado usando técnicas de micro encapsulación de los preparados vaccinales. Los métodos por inmersión son simples y rápidos, requiriendo sólo algunos segundos de exposición de los animales. Los mecanismos de ingreso de los antígenos parecieran ser principalmente a través de branquias, piel y probablemente, la línea lateral (órgano sensorial de los peces).
El uso de baños hiperosmóticos fue preconizado para aumentar el ingreso de antígeno, pero se ha observado que es estresante y no hay diferencias con las inmersiones isoosmóticas corrientes. La utilización de aerosoles también ha sido explorada, observándose que no presenta mejores resultados que los métodos por inmersión y tienen la desventaja de producir un mayor nivel de estrés en los peces.
Vacunas contra enfermedades bacterianas
El mayor éxito en el desarrollo de vacunas de uso masivo en acuicultura ha sido contra enfermedades bacterianas. Actualmente existen bacterianas (vacunas preparadas con bacterias muertas) comerciales contra la enfermedad entérica de la boca roja, vibriosis, vibriosis de agua fría (Mitra), forunculosis y septicemia entérica del bagre. Además de las vacunas previamente mencionadas, se han efectuado muchas investigaciones para otras afecciones y especialmente contra la enfermedad bacteriana del riñón, por su gran importancia en salmónidos.
Es importante saber que existe un marco legislativo que propone y controla mediante distintas directivas el desarrollo de la acuicultura sostenible, como son la protección de los ecosistemas acuáticos y de la vida acuática, la salud de estos organismos y la prevención de sus enfermedades. Para ello, se establecen ciertas practica para prevenir enfermedades: El mantenimiento de la calidad del medio, a aplicación de una nutrición y alimentación optima, La prevención e higiene en las instalaciones y medio, La estimulación de la inmunidad y utilización de vacunas para ciertas enfermedades y en general, la aplicación de códigos de buenas prácticas en la producción que hacen disminuir el estrés de los organismos y su predisposición a los brotes infecciosos. Poniendo de relieve la gran importancia de las medidas preventivas, el control y de regulación de las enfermedades contagiosas y las normas de inspección y certificación sanitaria.