Partiendo de materias primas como: maíz, trigo, remolacha, patata, soja, y la caña de azúcar, se vislumbra un futuro prometedor en la fabricación de productos biodegradables; La innovación medio ambiental ha generado que las industrias hayan desarrollado más de 20 tipos de plásticos a partir de materias primas renovables como las ya antes mencionadas. El uso de estos materiales bioplásticos se está extendiendo en varios sectores tales como en la medicina la cual los ha empleados para realizar prótesis e hilos de sutura, así como, en la alimentación principalmente usado para crear envases para almacenar, así como, en juguetes, e incluso en el mundo de la moda y, por supuesto en bolsas biodegradables conoce hoy empresas que suman a la línea verde empleando esta sofisticada tecnología que cuidad nuestro planeta.
Bioplásticos a base de la cáscara del plátano
Cabe destacar que los plásticos convencionales, producidos a partir de los derivados del petróleo, originan enormes problemas de contaminación ambiental por no ser biodegradables, permaneciendo como contaminantes durante largos períodos. Al respecto se han originado una enorme cantidad de investigaciones, con el objetivo de obtener polímeros biodegradables con propiedades idénticas a las de los plásticos convencionales, que puedan sustituir a estos últimos en aplicaciones semejantes. El plástico es la tercera aplicación del petróleo más usada en el mundo, y al año consumimos 300 millones de toneladas y como consecuencia se lanzan a la atmósfera toneladas de dióxido de carbono. Al adquirir productos con envases hechos de plástico y desechar estos, inconscientemente estamos contaminando al planeta.
El bioplástico, fabricado a partir de almidón de plátano comparte las características con los elaborados a través de derivados de petróleo. La mayor diferencia entre el plástico que actualmente se fabrica y el producido con base en almidón, es que el segundo es completamente biodegradable y no tóxico, una vez degradado puede usarse incluso como material de compostaje (abono). Esta ventaja proviene, precisamente, en el origen vegetal de la materia prima, lo que reduce nuestra dependencia del petróleo, que desde décadas domina nuestra sociedad.
Papel hecho con los desechos de la caña
Actualmente en el Ecuador, las empresas papeleras aprovechan el bagazo de caña para fabricar papel ecológico 100 % libre de productos químicos y blanqueadores, tal es el caso de la compañía Earth Pact quien es capaz de producir papel amigable con el medio ambiente, La marca ofrece una gama de productos que incluyen cartulinas resistentes a la grasa, esmaltadas, no esmaltadas y papeles para impresión y escritura. Poseen excelente desempeño de conversión y óptimas características de impresión para una extensa variedad de usos finales. Además, permite establecer responsabilidad social al querer utilizar un producto alternativo y sostenible para proteger el medio ambiente.
Iniciativas que buscar un cambio a favor de la naturaleza
BASF una fabrica bolsas biodegradables ecológicas que mantienen su hermeticidad y se descomponen completamente durante el compostaje gracias al plástico Ecovio que ha desarrollado. También podemos mencionar la empresa de automóviles Ford la cual obtiene composite gracias a la transformación de la paja. Otro caso muy sonado es del fabricante de electrónica NEC el cual está realizando pruebas con bioplásticos fabricados a partir de cáscaras de anacardos.
Así mismo se conoce que: El aceite de ricino sirve para fabricar poliamida, lignina y aceite de soja de poliuretano. John Deere utiliza para sus tractores, piezas fabricadas a partir de aceite de soja o de plásticos reforzados con fibra de lino. De forma que los plásticos de materias primas renovables, parecen imponerse especialmente en el sector alimentario. Por ejemplo, Danone está utilizando envases de bioplástico en Alemania, y prevé pasar a los embalajes fabricados con materias primas vegetales para otras líneas de productos. Se fabrican por ejemplo, embalajes biodegradables a partir de fibra de plátano para el envasado y transporte de productos agrícolas estos envases reducen el consumo de materias fósiles y liberan menos CO2.
En la actualidad se obtienen más de 50 millones de toneladas al año de productos biodegradables a partir de materia prima vegetal. Se ha previsto que en 10 años este mercado crezca un 50%. Por lo que se estima que generará un impacto positivo en la conservación del medio ambiente y los ecosistemas.