El huevo es un alimento de excelente calidad, rico nutricionalmente y con una enorme capacidad de penetración en dietas de culturas de todo el mundo. Esta es la razón existe la explotación comercial de aves y es precisamente para comercializar los huevos que dichas aves ponen.
En este sentido, se necesita de toda una infraestructura y una logística para sacarles el mayor provecho a las aves ponedoras que generalmente son gallinas ponedoras; y al mismo tiempo cuidar de varios factores, como su salud, la alimentación y, lo más importante, el sitio que se usará como granja.
Por esta razón, las granjas de gallinas ponedoras industriales cuentan con celdas mejoradas donde la gallina o (aves) tiene espacio para moverse e incluso debe contar con el forraje necesario para su alimentación. Esto se debe a que se crearon nuevos estándares y normativas para la crianza de gallinas ponedoras. Esto debido a que el sistema anterior que se usaba en muchos países ocasionaba ciertos problemas relacionados con la salud y la higiene en general. Conoce más sobre la industria de los huevos a continuación.
Crianza comercial de gallinas ponedoras
La finalidad de esta forma de crianza es la mayor productividad de huevos para la venta al menor bajo costo posible. Es por tal motivo que para este tipo de crianza es necesaria toda una infraestructura, así como mano de obra especializada que permita generar el mayor provecho a la crianza de las gallinas ponedoras con un menor riesgo.
Las gallinas ponedoras de crianza comercial deben contar con espacios y celdas mejoradas y especializadas donde el ave tenga la posibilidad de alimentarse y moverse sin poner en riesgo su salud ni la integridad de la postura. Es necesario regirse por una serie de normativas que permiten el desarrollo idóneo de este tipo de actividad, las cuales van desde las normativas de bioseguridad para el manejo y movilidad dentro de la granja avícola, hasta las la correcta infraestructura para el alojamiento de las aves.
La crianza comercial o industrial de gallinas ponedoras, para que tenga un mejor rendimiento en la producción de huevos para venta, se debe hacer en galpones con jaulas donde las aves puedan acceder las 24 horas del día a alimento, agua y al servicio prestado por los trabajadores avícolas.
Entre los beneficios de la cría en jaula, el grupo JHS (2020) expone: “(a) Mayor aprovechamiento del espacio debido a la densidad de aves por m²; (b) El consumo de Alimento es menos y la ganancia de peso es más efectiva; (c) La mortalidad es mucho más baja que los estándares; (d) El proceso de corte de pico y vacunación es más eficaz; (e) La pérdida de Alimento es casi nula; (f) Se facilita el control de roedores”.
Ciclos de puesta
Un factor que hay que tener en cuenta es el ciclo de mayor producción de las gallinas o aves ponedoras llámese codornices, pavos, gansos, palomas o los avestruces. Es su ciclo fértil, por ejemplo, una gallina ponedora por lo general, dura un poco más de dos años. Aunque las gallinas pueden vivir por más tiempo, su ciclo de producción es en comparación con su propia vida, relativamente corto. Por esta razón, después de estos dos años, se suele cambiar una gallina que haya cumplido con su ciclo con una más joven.
¿Influye el alimento en la postura y calidad de los huevos?
Las gallinas ponedoras tienen la capacidad genética para producir un gran número de huevos, con un tamaño promedio y pueden lograr buen peso del huevo tempranamente en el período de postura; un alimento de buena calidad influirá en la postura de los huevos; tanto en su cantidad como en su calidad.
Si una gallina es alimentada de manera balanceada y con ingredientes de calidad, su alimentación se notará en el tamaño, dureza, consistencia y color de los huevos. Las yemas de los huevos de la gallina pueden variar de color pues aun cuando éstos se ven influenciados por la edad y el ciclo de la gallina, el color de las yemas, las cuales pueden ir desde el amarillo claro o pálido hasta una coloración naranja intensa, son un claro indicio de la calidad de los alimentos que consume la gallina.
Si la gallina ponedora está consumiendo un alimento concentrado rico en maíz, estará consumiendo sustancias como las xantofilas, las cuales ayudarán a una pigmentación más deseada de la yema. De igual manera, la consistencia del albumen del huevo es otro elemento que indica la alimentación que está dándosele a la ponedora.
El alimento concentrado debe estar balanceado de tal manera que no posea un porcentaje alto de proteínas, lo ideal es un 17% de proteína. La cáscara del huevo, también es un factor relevante que indica tanto la edad como la cantidad de calcio que el ave está consumiendo.
La dureza de la cáscara permitirá un manejo más idóneo del huevo, por ello es recomendable que la gallina ´ponedora se le facilite “una dosis extra de calcio. Esto debido a que, a la hora de poner los huevos, el calcio se extrae de sus propios huesos. Así que, la provisión de calcio, además del fósforo, son elementos que contribuirán a la salud física de las gallinas, y contribuirá con la fecundación de huevos de alta calidad” (Domínguez, M., 2017).
Razas de gallinas ponedoras
Existen varias razas de gallinas de postura o ponedoras. Algunas son más productivas que otras; mientras que hay razas de pollos de postura autóctonas de ciertas regiones y cuya fertilidad es más efectiva si permanece en su hábitat o zona de crianza. Estos son los nombres de las razas más gallinas ponedoras: Hy-line, Hisex Brown, Hisex White, Leghorn, Babcock. Esto es algo que hay que tener muy claro, ya que es importante escoger el tipo de gallinas para su cría y fines. La mayoría de ellas son usadas para fines comerciales. Pero también pueden adaptarse con rapidez a las granjas o corrales caseros.
La producción mundial de huevos continúa aumentando
La producción mundial de huevos continúa experimentando un crecimiento sustancial con las últimas cifras que sugieren un aumento del 24% en la última década. Las cifras publicadas por el departamento de estadísticas de la Organización de Alimentos y Agricultura muestran que la producción total de huevos ha aumentado de 61.7 millones de toneladas en 2008 a 76.7 millones de toneladas en 2018.
China continúa liderando el camino, produciendo 466 mil millones de huevos en 2018, lo que representa el 34% del mercado global. China ha sido el mayor productor mundial de huevos durante los últimos 30 años y un estudio publicado en septiembre de 2018 (Producción de huevos en China – World Poultry Science Journal) descubrió que el rápido crecimiento económico, las cadenas de suministro mejoradas y los precios favorables fueron razones clave para el crecimiento. A China le siguen la UE, los EE. UU. Y la India, y estos 4 producen casi el 60% de los huevos del mundo, mientras que los siguientes 6 productores más grandes ocupan el 16% del mercado. Esto significa que los 10 principales productores de huevos representan más de 3 ⁄ 4 de la producción mundial de huevos.